Dato curioso
Se calcula que si todos los hoteles de Estados Unidos fueran ecológicos, eso equivaldría a convertir 12 millones de barriles de petróleo en 139 millones de árboles.
Estas cifras nos demuestran que es fundamental que el sector de la hotelería se preocupe por tomar medidas concertadas de reducción de huella ambiental. Porque sin un mundo sostenible, tampoco existirán los hoteles.
¿Qué significa esto de ser sostenible?
Durante los últimos años, diversos informes de la ONU y de otras organizaciones ambientales trazaron un panorama bastante pesimista en lo que respecta a la salud del planeta, al impacto que genera la vida humana en el medioambiente y al cambio climático.
A pesar de este escenario tan tenebroso, la creciente sensibilización que se ha venido realizando durante las últimas décadas parece estar teniendo algunos efectos positivos: se habla cada vez más sobre los efectos negativos que la vida contemporánea provoca sobre el medioambiente, desde la cantidad de plástico que hay en los océanos hasta el efecto invernadero originado por la liberación de carbono.
Hace mucho que estas preocupaciones han ido más allá del ámbito de las asociaciones ambientales o de las preocupaciones individuales, para alcanzar al sector empresarial. Ha habido un aumento exponencial de marcas que se autodefinen en el mercado como «verdes» o «sostenibles».
Al hablar de sostenibilidad nos referimos a algo mucho más amplio que a la preservación del medioambiente.
En 2015, la Organización de la Naciones Unidas propuso una agenda con 17 objetivos de desarrollo sostenible con la meta de alcanzarlos hasta fines del año 2030. El objetivo de esta agenda es crear un modelo global de desarrollo para las sociedades que contribuya a terminar con la pobreza y el hambre, promover la prosperidad y el bienestar de todos –ya sea mediante el acceso al cuidado de la salud, a la educación, entre otros–, además proteger el medioambiente y luchar contra el cambio climático.
En pocas palabras, estos 17 objetivos se basan en tres tipos fundamentales del desarrollo: el desarrollo económico, el social y el medioambiental.
Cada vez son más las empresas que muestran su intención de transitar un camino más ecológico, ya sea a través de los productos que ofrecen o en su producción y operación.
El caso del sector de hotelería no es diferente. En algunos casos, estas temáticas empezaron a ganar importancia debido al cambio del perfil comportamental de los clientes (hoy en día, la identidad de un hotel es fundamental en el momento de elegir un alojamiento y mucha gente busca lugares donde identifiquen preocupaciones por la ecología) y muchas cadenas hoteleras adoptaron medidas para reducir su huella ambiental ya desde su origen.
De este modo, en los últimos tiempos se está asistiendo a la creación de departamentos o proyectos verdes en cada hotel, con el objetivo principal de ocuparse del impacto ambiental vinculado con la actividad y cuya actuación pasa por la implementación de una serie de medidas que, en su conjunto, impactan de forma positiva en el medioambiente.